Muchas veces nos engañamos, creemos que pensamos de una forma, que hacemos lo correcto, nos convencemos de que las cosas son así porque sí y actuamos basándonos en intenciones erróneas, sin conocer realmente nuestra verdadera intención... la mayoría de las veces nos equivocamos, aunque sigamos mintiéndonos para ahuyentar esa pequeña vacilación de "y si no estoy siendo sincero conmigo mismo?" ... pero normalmente no buscamos más sentido a nuestros pensamientos y sentimientos que los meramente superficiales y fáciles de obtener, no hurgamos en ellos para llegar al quid de la cuestión porque definitivamente... no nos interesa llegar a conocer nuestro verdadero "yo" por temor a la realidad, al dolor.
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